Introducción Libros Memoria Presidencial

A través de estas páginas, los lectores podrán recorrer y rememorar las celebraciones y los hechos que marcaron a Chile el año 2010. el año de nuestro Bicentenario. Fue un año histórico, dramático y de profundas emociones para nuestra Patria.

Las celebraciones de ese 18 de septiembre, desde algunos meses antes y otros después, se desarrollaron a lo largo y ancho de nuestro país. Lo celebramos unidos, en familia, recordando y aprendiendo de nuestro pasado, viviendo el presente con confianza y mirando el futuro con optimismo y esperanza.

Pero estas celebraciones se desarrollaron en un año que no olvidaremos. El 2010 sufrimos uno de los mayores terremotos en la historia de la humanidad, seguido por una serie de tsunamis que devastaron nuestras costas, llevándose consigo la vida de más de 500 compatriotas y dejando a casi dos millones de personas damnificadas. Pero de las ruinas se levantó un pueblo solidario y valiente, que de inmediato decidió arremangarse las camisas, secar las lágrimas y volver a caminar.

p>También fue el año donde llevamos a cabo una de las mayores epopeyas de nuestrahistoria: el rescate de los 33 mineros de Atacama. Pero lo que comenzó como una tragedia en un poblado lejano e inhóspito, terminó transformándose en una bendición, donde nuevamente Chile demostró que cumple sus compromisos, que nunca se rinde ante la adversidad y que jamás abandona a su gente.

La celebración del Bicentenario, junto a estos y otros hitos que marcaron ese año, deben servir de inspiración y motivo de orgullo por el país que entre todos hemos construído desde hace 200 años en que nos convertimos en una República libre e independiente. Estas celebraciones realzaron nuestro espíritu patriótico y solidario que nos caracteriza como Nación.

El 27 de febrero del 2010 será una fecha que los chilenos no olvidarán. Siendo Presidente Electo y a tan solo 12 días de asumir como tal ante el Congreso Nacional, un terremoto 8.8 grados, que llegó acompañado de un tsunami devastador, afectó a la mayoría de las regiones de Chile, recordándoles a sus habitantes que su historia no ha sido hecha de caminos fáciles ni rutas señaladas, sino que de grandes adversidades que muchas veces se manifiestan en una naturaleza indomable.

En las páginas de este libro se da cuenta de lo que fue ese terremoto, del daño que causó tanto material como humano, de las 222 mil familias que perdieron su vivienda, del millón 250 niños que quedaron con sus colegios destruidos, de los hospitales, carreteras, puentes, puertos, caletas, aeropuertos, sistema de agua potable y obras de riego severamente dañadas y de los más de 500 fallecidos o desaparecidos que nos dejó esta tragedia. Es a ellos, anónimos que colaboraron para levantar Chile.

La historia de estas páginas es la del esfuerzo que una Nación completa realizó para levantarse y de todo el proceso de reconstrucción, hoy tan admirado en el mundo entero, se llevó a cabo juntando fuerzas del sector público y privado. Es un relato que comienza con una devastación y termina cuatro años después como un ejemplo de lo que los chilenos pueden lograr cuando trabajan unidos por un mismo fin.

Hace cien años celebramos nuestro primer siglo de vida independiente y para entonces, como una forma de celebrar este hito, se construyó la Estación Mapocho, se creó el Parque Forestal, se levantó el Museo de Bellas Artes, el Palacio de Tribunales de Justicia de Santiago, entre otros. Siguiendo esta idea de conmemorar esta fecha con obras que mejoren nuestra calidad de vida, rescaten lugares simbólicos y patrimoniales que están em grave deterioro y legar a los que vendrán infraestructura, edificios y espacios públicos de calidad, nace el programa Legado Bicentenario que integra 100 iniciativas a lo largo de todo chile.

De esta manera y a través de obras concretas categorizadas en Rescate Patrimonial, Espacios Cívicos, Parque Urbanos, Espacios Culturales, Conservación de la Biodiversidad, Centros Deportivos y Grandes Obras de infraestructura se dejó una importante herencia material del Gobierno de Sebastián Piñera, a quien le correspondió liderar el año del Bicentenario.

Recorrer las 100 obras a través de este libro, donde cada una está explicada en detalle, es recorrer también Chile en toda su riqueza y diversidad. El rescate de nuestro patrimonio, así como proyectos largamente anhelados por una comunidad, son una herramienta que permite a las personas apropiarse de su entorno y sentirse parte de una misma sociedad. Cumplen el rol de ser un espacio de encuentro y de identidad, un valor que forma parte de la riqueza de los pueblos y ciudades, que suelen ser motivo de orgullo para sus habitantes y de placer para sus visitantes. Y este libro es un modesto testimonio de aquello.

Los parques urbanos, especialmente cuando se construyen en zonas de alta vulnerabilidad, tienen la virtud de ser una extensión del reducido espacio hogareño. No es de extrañarse que la literatura ponga énfasis en que los parques urbanos ayudan a una mejor integración social y a que las personas establezcan una mejor relación con el espacio público, convivan en armonía con el y se sientan parte de una comunidad que comparte y vive dicho espacio.

Durante el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera se desarrollaron casi cien parques urbanos, ya sea mejorando uno ya existente o construyendo uno nuevo, creando o mejorando más de 322 hectáreas en los próximos años. Junto con ello se creó el programa Conservación de Parques Urbanos que se asegura recursos para la mantención de los mismos.

Para celebrar y promocionar estos logros, el 2013 se lanzó el programa Elige Vivir Tu Parque, que tiene varias aristas: Construcción y conservación de parques urbanos, creando una Red Nacional de parques, y definiendo octubre como el mes de los parques, donde se intensifican diversas actividades para promover el uso de estos espacios ciudadanos. De esto y de cada uno de estos parques da cuenta este libro.

Este libro que reúne 43 discursos escogidos del Presidente Sebastián Piñera, pronunciados entre el 2010 y 2014, ofrece una gran oportunidad para apreciar lo que fue su primer gobierno, los principales hitos y el ritmo en que avanzó el país.

A través de estos discursos puede advertirse que se trató de un Gobierno con metas, programas y principios claros. Un gobierno que le tocó construir en tiempos difíciles, pero que sin embargo logró cumplir su programa enfrentando con éxito el enorme desafío de la reconstrucción de la vasta zona afectada por el terremoto y tsunami del 27 de febrero del 2010. Un gobierno que rompió muchos de los prejuicios que pesaban sobre la centro derecha, la que se ocupó de estimular el emprendimiento, recuperar el crecimiento económico, hacer retorceder con mayor velocidad la probreza y la delincuencia. Un gobierno que se preocupó de proteger a la faimlia, de profundizar la democracia defendiendo los derechos humanos, protegiendo los derechos de los consumidores. en fin, un gobierno que promovió el respeto a la diversidad y actuó con una marcada vocación social. Y todo esto contado desde la mirada de quien le tocó liderar este período de nuestra historia.

Al término de un gobierno siempre es bueno levantar la mirada y realizar un balance de lo que hizo durante cuatro años para construir un Chile mejor, avanzando hacia una sociedad de oportunidades, seguridades y valores, mejorando la calidad de vida de todos los chilenos, y muy especialmente de los más vulnerables y la clase media.

Hay tiempos para asumir compromisos y tiempos para dar cuentas de su cumplimiento. Así vomo los candidatos gozan de libertad para hacer promesas, los gobiernos tienen el deber de rendir cuentas de las obras realizadas.

Cuanto se logró durante el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera es lo que está descrito en estas páginas, que contienen una síntesis de esos cuatro años, una rendición de cuentas de lo que se comprometió y lo que se cumplió. Su énfasis no está tanto en los diagnósticos de los múltiples problemas y desafíos, sino en los avances y logros que se alcanzaron. Son las cifras, los hechos y obras concretas los que habían aqúí con toda su fuerza y elocuencia.

Este libro reúne, con amplio detalle, las acciones desarrolladas por Chile en materia de política exterior durante el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera. A través de sus páginas se puede seguir no solo la manera en que Chile respeta los principios que lo guían en este ámbito, sino también el modo en que se despliega su política exterior en un mundo globalizado.

Entre los principales hitos está que, por quinta vez en su historia, Chile fue elegido miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, además de participar en diversas organizaciones multilaterales. Otro hito fue la constitución de la Alianza del Pacífico, que reúne a México, Colombia, Perú y Chile, que ha logrado gran dinamismo y que ha despertado gran interés internacional al proyectarse como una de las más activas y profundas iniciativas de integración en la región. También resalta la Presidencia Pro Tempore de la CELAC que realizó su primera cumbre en nuestro país, junto con la cumbre de la Unión Europea. Todo esto junto a las acciones más cotidianas de la cancillería y las visitas tanto del Presidente Piñera a distintos países como aquellas visitas que vinieron a Chile, son las líneas que componen este libro.